Todos tenemos limitaciones de una u otra forma, y todos necesitamos ayuda en algunos momentos de nuestra vida.
Pues bien, ayer todos quisieron desplazarse en la silla de Eneko y ver cómo se ve el mundo desde ahí, concretamente nuestra clase, nuestro minimundo donde nos movemos todos los días. Se desplazaron con la silla por la clase, e hicieron las mismas cosas que hace Eneko todos los días, como ir a por la jarrita para beber agua, desplazarse a distntos lugares del aula, llevar lapiceros (cuando les toca ser capitán de mesa, lo tienen que hacer y Eneko lo hace también), etc...
Algunos se desplazaban con soltura, a otros les costaba más, algunos necesitaban ayuda...
Aquí podéis ver algunas imágenes:
Se dieron cuenta que no es fácil, que a Eneko sólo hay que ayudarle cuando nos lo pide, como todos los demás, y que le tenemos que ayudar a hacer lo difílcil fácil, siempre que esté en nuestras manos....
Terminamos dándole muchos besos y abrazos a nuestro amigo.
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